Bobby Unser saluda luego de su último triunfo en las Indy 500 en 1981 (Prensa IndyCar).

El automovilismo estadounidense está de luto por la partida de Robert “Bobby” Unser, uno de los referentes históricos de la IndyCar, donde fue bicampeón y en tres ocasiones venció en las 500 Millas de Indianápolis. Integró una familia que destacó en la categoría de autos de fórmula más importante del planeta detrás de la Fórmula 1. El norteamericano falleció ayer a los 87 años en su casa de Nuevo México.

Unser venció en las míticas Indy 500 en 1968, 1975 y 1981, lo que lo convirtió en uno de los dos únicos hombres en ganar la carrera en tres décadas diferentes. Era parte de una exitosa familia de en el automovilismo: su hermano menor, Al, ganó las 500 Millas cuatro veces, en 1970, 1971, 1978 y 1987. Otros cuatro miembros de la familia también compitieron en la Indy 500.

Ambos también corrieron en la Argentina en la Indy 300 Rafaela, en lo que fue la única visita de la IndyCar al país, el 28 de febrero de 1951 en el legendario óvalo santafesino que es más extenso que el de Indianápolis. Hace medio siglo su hermano ganó las dos mangas y Bobby abandonó en la primera competencia y no pudo largar en la segunda.

El día que la IndyCar corrió en Rafaella. Los autos antes de la largada y entre ellos el de Bobby Unser (Club Atlético Rafaela).

“Cuando mencionas los íconos de las carreras, y en particular el Indianapolis Motor Speedway, Bobby Unser era una leyenda”, dijo el presidente del Indianapolis Motor Speedway, J. Douglas Boles, en un comunicado.

“Podía conducir y ganar en cualquier tipo de auto y en cualquier tipo de pista. Y fue mágico en Indy. Pero conducir fue solo una parte de lo que hizo a Bobby, tan icónico. Su pasión de toda la vida por promover las carreras de autos y sus opiniones entusiastas que continuaron después de que colgó el casco tuvieron un impacto tan significativo”, agregó.

La categoría fue creada en 1911 y, más allá de sus diversos nombres, es la más antigua del mundo. En sus redes sociales publicó: “Hoy, el mundo de las carreras lamenta el fallecimiento del tres veces campeón de las 500 Millas de Indianápolis, Bobby Unser. Era el paquete completo: adorado por los fanáticos, divertido y encantador, y un verdadero campeón. Un ícono, siempre recordado”.

El histórico jefe del equipo, Roger Penske, también rindió homenaje a Unser, quien le entregó una victoria en la Indy 500 a su escudería en 1981. “Simplemente no había nadie como Bobby Unser. Era un competidor feroz en la pista, y su personalidad más grande que la vida lo convirtió en uno de los corredores más queridos y únicos que jamás hayamos visto”, dijo el team-manager.

“Más allá de sus muchas victorias y logros, Bobby fue un verdadero corredor que elevó el rendimiento de todos los que lo rodeaban”, destacó.

La victoria de Unser en 1981 en las Indy 500 fue considerada una de las más controvertidas en la historia. Bobby recibió la bandera a cuadros delante de Mario Andretti. Pero los comisarios deportivos le quitaron el triunfo porque dijeron que superó autos con bandera amarilla, algo no permitido. Bobby apeló la medida y luego de cinco meses le devolvieron la victoria.

El propio Andretti, campeón de F1 en 1978, lo recordó en Twitter. “Me uno al mundo de las carreras de luto por el fallecimiento de Bobby Unser. El mejor de los tiempos, cuando un competidor feroz también puede ser un muy, muy, muy, buen amigo. RIP mi amigo. Gracias por los recuerdos”.

Aquella victoria fue la última de la carrera de Unser en IndyCar, que incluyó 35 triunfos, 83 podios y dos campeonatos, en 1968 y 1974, subcampeón en 1970, 1979 y 1980, y tercero en 1967, 1969 y 1975. Sumó tres carreras de la NASCAR entre 1969 y 1973, y terminó cuarto en una de ellas. También celebróó trece veces en la tradicional trepada de Pikes Peak.

Luego de su retiro, Unser se dedicó a ser comentarista de TV en las carreras en las cadenas NBC, ABC e ESPN.

Se fue un grande del automovilismo estadounidense que dejó su sello. Bobby Unser hoy es recordado por sus logros deportivos y por su impronta, alguien que supo combinar el carisma y el talento lo que le valió ganarse millones de fanáticos.